MADRID RÍO.- (Resumen).

Ahora sí. Nos vamos, no sin nostalgia, dejando Madrid Río en nuestro recuerdo.

Pero, no sería justo hacerlo sin informar de lo que esta magna obra ha supuesto para los madrileños, sus visitantes y los habitantes de la zona.

Es, sobre todo, Madrid Río, un eje vertebrador de ambas márgenes del río Manzanares. Donde antes no habían más que miles y miles de vehículos circulando y separando ambas márgenes, hay ahora un inmenso parque lineal que va desde las afueras de Madrid en El Pardo hasta Getafe, con una superficie de 1.210.881 metros cuadrados, consiguiendo que los madrileños miremos y conozcamos el sur y el oeste de la ciudad, antaño zonas más bien deprimidas.

Baste decir que se han plantado 33.623 nuevos árboles pertenecientes a 47 especies diferentes, 470.844 arbustos y 210.898 metros cuadrados de pradera de baja demanda hídrica.

Vertebra también otros parques que ya existían pero que ahora se encuentran perfectamente conectados. La Casa de Campo, el Parque del Oeste, el Campo del Moro, la Cuña Verde de Latina, el Parque de San Isidro y los parques del Manzanares Norte y Manzanares Sur.

33 clásicos y nuevos puentes y pasarelas, caminos con itinerarios peatonales y ciclistas de "movilidad blanda", 5 miradores desde los que se pueden observar las mejores vistas de la ciudad y muy especialmente la "cornisa monumental" de Madrid, diversas fuentes ornamentales a lo largo del recorrido, algunas con jardines de lirios acuáticos, "chiringuitos", (uno ya inaugurado), con sus terrazas y cenadores para poder tomar una buena cerveza con su correspondiente tapa e, incluso, comer y cenar y hasta una "playa", fruto de la propuesta ganadora de un concurso de ideas celebrado entre 3.525 escolares de Madrid, constituida por tres recintos ovalados con diversos efectos de agua. Una lámina superficial en la que poder tenderse y remojarse, chorros de agua en altura con efectos cambiantes y nubes de agua pulverizada. A su alrededor, zonas de descanso y estancia, con una superficie de 6.500 metros cuadrados y casi 300 árboles.

33 pistas deportivas en las que podemos practicar patinaje, fútbol, ciclismo extremo bmx, balonmano, pádel, balonvolea, tenis o escalada. También vertebra "Madrid Río" otros espacios polideportivos ya existentes como "La Caja Mágica", la Casa de Campo o el Club de Campo.

Los niños también han de ser grandes protagonistas en "Madrid Río". 17 zonas de juegos infantiles, con 65 elementos diferentes, perfectamente integradas en el entorno ambiental.

Por último, tres grupos de espacios biosaludables con diferentes aparatos para la mejora del tono físico de personas adultas, incluso las de edad muy avanzada.

Seguro que me dejo muchas más explicaciones, pero creo que lo expuesto puede dar una idea de la magnitud de esta preciosa obra, (además del soterramiento del flujo de tráfico rodado de la M-30), que debemos al esfuerzo de los madrileños en general y al de nuestro Ayuntamiento en particular. Nos hemos endeudado, sí pero, después de visitar "Madrid Río", no creo que haya un sólo madrileño de buena fe que no aplauda la iniciativa. No hay más que charlar, como yo he hecho, con los habitantes de la zona que no pueden disimular su orgullo y su alegría. Sólo resta pedir que se respete al máximo todo lo realizado para disfrute de propios y extraños.

Es inevitable. Volveré a "Madrid Río". Lo haré porque me ha impresionado por su belleza y porque se han quedado muchas fotografías por hacer de tantos y tantos lugares que merecen la pena. Lugares que han quedado inéditos ahora, nocturnas, fuentes, etc.

Espero que hayáis disfrutado con las cuarenta entradas anteriores tanto como yo al publicarlas.

Y, si podéis, cuando vengáis a Madrid, no dejéis de visitar la zona. Os garantizo que merece muy mucho la pena.

Fuente de Información: Ayuntamiento de Madrid.